CANARIASVENEZUELA

lunes, 9 de marzo de 2009

Siguen expropiaciones


El presidente Hugo Chávez anunció el jueves por la noche que había ordenado la expropiación de la finca El Piñal, que ocupa unas 1.500 hectáreas en el noreste del país y que produce materia prima para cartones y empaques.
Chávez señaló que el "eucalipto se chupa casi toda el agua del subsuelo", por lo que habrá una "explotación racional" de esa madera, al lado de nuevos cultivos de frijoles, maíz, yuca y ñame.
El mandatario también anunció la intervención de otra finca de más de 2.000 hectáreas de extensión, llamada El Maizal, pero no mencionó quiénes son sus propietarios.
Estas medidas se producen en medio de una ofensiva en el sector agroindustrial, con la que el gobierno dice estar garantizando el acceso de la población a los productos de primera necesidad a precios justos.
El miércoles se informó de la intervención de la procesadora de arroz de empresas Cargill, por incumplir las cuotas de elaboración de arroz básico.
Acuerdo amistoso
Tanto Smurfit como Cargill accedieron a negociar con el gobierno los términos de la expropiación.
Mi reconocimiento a los que han estado usufructuando estas tierras por su cooperación
Hugo Chávez
"Mi reconocimiento a los que han estado usufructuando estas tierras por su cooperación", señaló Chávez en relación a la empresa de origen irlandés, a la que garantizó que "recibirá la correspondiente indemnización".
Sin embargo, no está claro cómo se producirá ese pago.
Antes de que comenzara la ola de intervenciones, el jefe del Estado había dicho que si decidía expropiar, no compensaría a los dueños en efectivo sino con bonos del Estado.
El jueves, el ministro de Agricultura y Tierras, Elías Jaua, reiteró que el presidente y el ministro de Finanzas determinarán la forma de indemnizar a las compañías afectadas.
Smurfit, que tiene más de 50 años en el país y en otras naciones de la región, señaló que sus tierras están valuadas en unos US$630.000.

Petróleo
En el pasado, el gobierno ha desembolsado dinero por la nacionalización de empresas, como CANTV, de servicios de telefonía.
Pero todavía tiene pendiente una disputa con la cementera Cemex por un proceso similar.
Analistas señalan que la caída en los precios del petróleo, del que depende casi en su totalidad la economía nacional, significa que el gobierno ya no puede contar, como antes, con la billetera para alcanzar sus objetivos de cambio.
Tanto el presidente como sus ministros han ratificando en las últimas horas la importancia de "transformar la estructura de la propiedad de la tierra" para su proyecto de "socialismo del siglo XXI".

Amenazas
Por otro lado, el recién nombrado ministro de Comercio, Eduardo Samán, declaró que pediría la expropiación de la planta arrocera de industrias Polar, la empresa más grande del sector alimentario en el país.
Samán participó en una asamblea popular a las puertas de la planta, ubicada en el estado Guárico.
La sesión fue interrumpida por una escaramuza, cuando el representante de Polar, Luis Carmona, pidió un derecho de palabra que le fue negado.
Por otro lado, el titular de Agricultura amenazó al presidente de la Federación Nacional de Ganaderos, Fedenaga, Genaro Méndez, con la expropiación de sus tierras "si se pone cómico".
El ministro le respondía así a una denuncia de Méndez, según la cual los ganaderos no tienen quién les compre el producto.
El alto funcionario lo consideró un intento de chantaje y ratificó que el gobierno está preparado para asumir la producción del sector agropecuario si los dueños se negaban a seguir adelante.

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